4. Mecánicos
Tal como en otros empleos que ya hemos mencionado, el mecánico se ve expuesto a un problema prolongado de postura. La necesidad de estar siempre en posiciones anormales para el cuerpo humano, causan desalineamientos y deformidades a largo plazo en la columna vertebral; además, está el agravante de que un mecánico por lo general tiene poco rango de movimiento dentro de sus labores, por lo que el sedentarismo también lo puede afectar.
Nuestras recomendaciones: a los mecánicos se les pueden aplicar las recomendaciones de otras labores altamente sedentarias: pausas activas, alarmas periódicas para revisar la postura y sobre todo, estiramientos regulares, para mantener el cuerpo elástico y fuerte.
3. Bodeguero
Contrario al mecánico, el trabajo en las bodegas suele caracterizarse por el constante movimiento y el uso de la fuerza, el problema es que si no somos conscientes de los límites de nuestro cuerpo y las prácticas adecuadas para mantenerlo sano frente a situaciones de estrés físico, lo más probable es que este empleo pase factura más temprano que tarde.
Nuestras recomendaciones: tal como en el caso de los obreros, los bodegueros necesitan de una mano amiga: la de sus supervisores. Las capacitaciones sobre cómo cargar peso, las prácticas saludables como las pausas activas y la adquisición de equipamiento que resguarde la salud de la columna son una responsabilidad compartida en este caso. No sobra decir por supuesto, que el empleado debe también cumplir su misión en casa y hacerse chequeos periódicos con un quiropráctico profesional.
2. Conductores
De taxi, de tractor o básicamente de lo que sea. Si pasas muchas horas conduciendo, es indispensable que tengas una rutina física cuando no lo haces, así puedes contrarrestar los efectos del sedentarismo y evitar que se atrofien tus articulaciones por los tiempos prolongados en una situación de estrés físico y frecuentemente mental. Debes tener en cuenta también, que tienes una alta probabilidad de sufrir sobrepeso si pasas la mayoría de tu tiempo sentado, por lo que esto es un aspecto clave al que debes prestar atención.
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Nuestras recomendaciones: ya te dimos pistas sobre unas de ellas, cuida tu peso y mantente activo. Pero también queremos que te asegures de tomar pausas para salir del vehículo, estirarte y moverte. Un tratamiento continuo y especializado con un quiropráctico también es de vital importancia para ti.
1. Ser madre
Quizás el único trabajo de nuestra lista que sin tener salario, puede convertirse en el más gratificante; pero esto no significa que la maternidad sea un trabajo fácil. La expresión “trabajo de tiempo completo” cobra verdadero sentido para las madres, quienes dedican años de sus vidas a cuidar a sus pequeños.
El embarazo es visto como una de las más grandes maravillas que puede lograr un cuerpo humano, pero eso no quiere decir que lo logre sin consecuencias, ya que es realmente brutal para nuestro organismo si no lo afrontamos de forma responsable.
Entre los cambios hormonales y físicos, las mujeres deben aprender a llevar un gran peso durante meses e incluso después de eso, deben adaptarse a las necesidades de sus hijos, agachándose, cargando, corriendo y afrontando cambios enormes en su estilo de vida.
Nuestras recomendaciones: lo primero que deben hacer las mamás es recurrir a expertos. Durante el embarazo y después de él, el cuerpo de una mujer es extremadamente frágil y en ese estado debe recibir todos los cambios y esfuerzos por venir. Visitar regularmente al quiropráctico no solo es saludable, puede ser realmente placentero, por lo que es una muy merecida atención para nuestras queridas madres.
Por supuesto desde casa también deben haber cuidados, pero siempre deben estar ligadas al criterio de profesionales especializados en distintas áreas de la salud.