4 formas en que la quiropráctica ayuda a combatir la infertilidad
En nuestro blog anterior hablábamos de la preocupante tendencia al aumento en las últimas décadas de casos de infertilidad en parejas, y cómo, entre todos los tratamientos posibles para lograr sanarla, la quiropráctica podría ser uno de los menos considerados, a pesar de mostrar resultados positivos en diversos estudios recientes.
Probablemente te preguntarás cómo un tratamiento que se enfoca en nuestro sistema musculoesquelético podría tener una influencia en condiciones que suelen ser de origen hormonal o reproductivo, pero lastimosamente, esto se debe a que la mayoría de las personas tenemos un conocimiento parcial de lo que es la quiropráctica y el gran potencial que tiene sobre todo nuestro cuerpo.
Lo que hay detrás de un ajuste quiropráctico
La quiropráctica es un tratamiento pensado para optimizar el funcionamiento del sistema nervioso, que está repartido por todo el cuerpo y se encuentra centralizado en nuestra columna vertebral; cuando nuestra columna sufre traumas por accidentes o posturas incorrectas sostenidas en el tiempo, el flujo correcto de nuestro sistema nervioso se ve interrumpido o dañado, lo cual altera todas las terminaciones nerviosas en nuestro cuerpo que se vean afectadas por esta disrupción.
El sistema nervioso no solo nos permite sentir, también tiene una influencia directa en nuestra movilidad, visión, procesos mentales, y sí, también en nuestra producción hormonal, por lo que un sistema nervioso alterado puede tener implicaciones negativas en nuestra capacidad para concebir un bebé.
Un diagnóstico y tratamiento quiropráctico correcto puede entonces ser determinante para lograr combatir y sanar la infertilidad, incluso si las causas de esta no tienen que ver con nuestro sistema nervioso.
1. Ayuda a detectar el origen de la condición
La quiropráctica siempre ha buscado encontrar el origen del problema para tratar de forma más efectiva los síntomas, por eso, en caso de infertilidad, puede ser un tratamiento que de luz al por qué estamos teniendo problemas para concebir, para así ayudar a enfocar los esfuerzos hacia el lugar correcto, ya sea desde la quiropráctica o una combinación de esta con otro tratamiento.
Desde el punto de inicio, con exámenes físicos y análisis de radiografías, un quiropráctico puede detectar diversas subluxaciones y los efectos que pueden tener en otras partes de nuestro cuerpo; esto puede decirnos si el origen de nuestra condición radica en nuestro cerebro, en nuestro sistema reproductor o en otros órganos o partes de nuestro cuerpo.
Descubrir la raíz de la infertilidad es el primer paso para ir al lugar correcto en busca de alivio, además de que reducirá la inversión en tiempo, dinero y estrés que puede ser bastante alta para muchas personas.
2. Promueve el balance hormonal
Según la sociedad Endocrina, alrededor del 25% de los casos de infertilidad en mujeres se atribuye a desbalances hormonales, y aunque en los hombres no hay un porcentaje más exacto, también se ha descubierto que estos desbalances pueden tener un efecto negativo en la producción de esperma y la calidad del mismo.
El sistema nervioso tiene un vínculo cercano al proceso de secreción hormonal y su distribución correcta en nuestro cuerpo, al ser tratados por medio de la quiropráctica, ayudamos a que nuestro sistema nervioso esté en buenas condiciones para apoyar la producción ideal de hormonas y el aprovechamiento máximo de estas.
3. Sana problemas en el sistema musculoesquelético y lo prepara para el parto
Entre uno de los factores de riesgo menos conocidos de la infertilidad son los accidentes traumáticos en el cuerpo de las mujeres y los hombres que pueden causar infertilidad.
En el caso de las mujeres, condiciones como la escoliosis, la disfunción del suelo pélvico y el desalineamiento de las caderas pueden poner presión y estrés en los órganos reproductores impidiendo la concepción, mientras que en los hombres, lesiones en los nervios espinales pueden causar problemas de circulación que afecten la capacidad de eyacular y la calidad del semen.
Un tratamiento quiropráctico puede ayudar en ambos casos, aliviando la presión de la pelvis sobre el sistema reproductor de la mujer y mejorando la circulación de la sangre y la fortaleza de la columna en caso de lesiones leves en los hombres.
4. Acompaña un proceso de salud y bienestar general
El objetivo de la quiropráctica no solo es sanar un trauma o una condición en específico, esta ciencia de la salud busca que las personas estemos sanas de forma integral.
En un momento tan importante en nuestras vidas como el embarazo, es más importante que nunca tener las recomendaciones y el acompañamiento de un experto que no solo te sanará, sino que te dará las herramientas para mantener fuerte durante el resto de tu vida. Un quiropráctico experto te puede dar ideas sobre alimentación y cuidados que te pueden servir para abordar esta nueva etapa de vida en tu mejor versión.
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