5 razones por las que debemos desconectarnos cada tanto
La tecnología gobierna nuestras vidas, desde el trabajo hasta el ocio están siendo determinados por los dispositivos como televisores, celulares, computadores y tablets. La tecnología ha hecho tantas cosas tan aparentemente accesibles que ha relegado muchas otras y ha empezado a tener consecuencias en nuestra salud física y mental.
Aunque son innegables los grandes beneficios que vienen con migrar muchas de nuestras actividades a la virtualidad, también es necesario reconocer la importancia del equilibro y los momentos en los que debemos apagar las pantallas y enfocarnos en lo que está pasando en vivo y en directo a nuestro alrededor, ¿por qué? Aquí te compartimos algunas razones:
1. Tienes menos posibilidades de sufrir de ansiedad y depresión
Toda esa gente viajando, con cuerpos de revista y vidas de ensueño pueden ser un estándar poco realista e innecesariamente doloroso para muchos de nosotros, por eso al momento de acercarnos a las redes sociales lo mejor es tener buen juicio y entender que son solo una pequeña porción de la vida de personas tan complejas como nosotros mismos. Un consumo excesivo de este tipo de plataformas puede hacernos creer que esa es la realidad y la única versión de la felicidad posible, pero esto está lejos de ser verdad. Baja tu teléfono y cuenta tus bendiciones, son muchas más que las que puedes proyectar en una red social.
2. Duermes mejor
De la mano con el punto anterior y con el agravante de que las luces brillantes de las pantallas son estimulantes muy poco saludables para nuestros ojos y nuestros cerebros, el uso constante de tecnología puede ser el causante de tus noches en vela y tus sueños caóticos. Procura no observar ninguna pantalla por lo menos una hora antes de ir a dormir ¿Qué puedes hacer en ese tiempo? Preparar tus cosas para el día siguiente, cocinar, leer, meditar o pasar tiempo en familia, vas a ir a la cama despejado y hasta lo suficientemente cansado para tener una excelente noche de sueño.
3. Te mantienes más activo
El tiempo que no pasas frente a una pantalla es tiempo que tienes que pasar haciendo algo; puedes ir de caminata con tu mascota, salir a bailar con tus amigos o incluso aprovechar la oportunidad para ponerte al día con los quehaceres de tu casa, todas estas actividades oxigenan la mente y renuevan tus espacios además de que mantienen tu cuerpo activo y deseando más aire fresco y campos abiertos para desacelerar el ritmo frenético de nuestras rutinas modernas. Incluso, sería divertido adquirir un nuevo hábito recurrente como ir a nadar o a clases de yoga, eso es menos tiempo de pantalla y más de vida.
4. Lideras con el ejemplo
Probablemente te pasa con tu pareja, tus amigos o hasta los más jóvenes de la casa: te sientas a conversar y ellos mismos están completamente absorbidos por sus teléfonos o computadores. La única forma válida para poder conectar de forma legítima es dando el ejemplo tú mismo y dejando a un lado los dispositivos en los momentos en los que quieras interactuar de forma activa y presente con alguien; puede tomar un poco de tiempo y de paciencia, pero tu esfuerzo puede convertirse en la oportunidad para crear nuevos planes y hobbies compartidos que ayuden a desconectarse del mundo virtual a todos.
5. Valoras el momento y la compañía
Los seres humanos somos la sal de la tierra, y aunque la tecnología nos ha permitido acercarnos a los que están lejos, también puede contribuir a alejarnos de los que están cerca, por eso, tómate un momento del día para apreciar a quienes están de forma presente a tu alrededor, agradeciendo la posibilidad de poder compartir el abrazo y el tacto que tanto añoramos los seres humanos y que podemos estar dando por sentado por estar frente a una pantalla.
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