¿Te vas a mudar? ¡Qué tu espalda no pague las consecuencias!
Pocas cosas son tan molestas y demandantes como una mudanza; por lo general, tanto el antes como el durante y el después requieren de esfuerzos físicos, mentales y hasta materiales para poder llevar a cabo todas las actividades que debes realizar durante esos días.
Desde mucho antes del día del traslado, tu cuerpo, tu mente y tu billetera serán puestas al límite, y con todo el estrés de la planeación, más el constante movimiento, al que probablemente no estás acostumbrado, te podrías estar garantizando a ti mismo fuertes dolores de cabeza y de espalda.
De hecho, la espalda es una de las áreas más afectadas por las mudanzas, incluso varios días o semanas después, muchas personas siguen experimentando las molestias provocadas por el esfuerzo llevado a cabo durante el traslado. Por eso, hoy te queremos dar unos consejos desde nuestra experiencia para que lo mismo por lo que pasaron otros, no te pase a ti.
Trabaja inteligente, no duro
Las mudanzas consumen tiempo, dinero y energía, así que vale la pena que te preguntes ¿A cuál de estos recursos le debo dar mayor prioridad para mi bienestar a largo plazo? Si quieres que te demos una pista, o mejor, un consejo, tu salud debería ir antes que el ahorrar unos cuantos centavos.
Al momento de mudarnos tenemos opciones y oportunidades de casi todos los rangos de precios, así que ya sea que puedas contratar profesionales o que puedas rentar carros o herramientas, no escatimes en complementos que puedan agilizar tu trabajo y facilitar el proceso. Recuerda que las malas posturas y los esfuerzos mal hechos son las causas principales de los dolores de espalda y más grave aún, de las desalineaciones en nuestra columna vertebral.
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Proyecta tus gastos y actividades y prepárate para ellos
Generalmente cuando nos mudamos, llevamos meses sabiendo que deseamos hacerlo y acudiendo a inmobiliarias o personas que nos ayuden a encontrar un nuevo lugar, así que, ¿por qué no tener este mismo nivel de previsión en otros aspectos de la mudanza?
Haz una lista de los factores que debes tener en cuenta para mudarte: los costos, los servicios que debes contratar, los recursos que debes tener a tu disposición, cuál es la mejor forma de conseguirlos… etc. Una vez tengas esta lista esté definida, piensa cómo puedes adelantar procesos para que se hagan a un ritmo que no sea muy agresivo para tu cuerpo o demasiado costoso.
Si empacas con calma, o si logras cotizar a tiempo varios proveedores para un mismo servicio vas a estar más preparado y menos estresado el día de la mudanza.
Prepárate física y psicológicamente para el cambio
Por más ayuda que contratemos, va a ser inevitable tener que lidiar con un poco de desorden y esfuerzo durante la mudanza, así que antes de que llegue el día de tomar acción, prepara tu cuerpo fortaleciéndolo por completo, recuerda que al momento de levantar cosas pesadas lo más importante es mantener la espalda recta, flexionar nuestras rodillas y usar la fuerza de las piernas para alzar el objeto que debas trasladar, así que es mejor tener un tren inferior y superior fortalecido para hacerlo bien y sin dolor.
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Las mudanzas también pueden ser estresantes y abrumadoras, así que tampoco es mala idea unos días antes tomarte el tiempo para hacer las cosas que te gustan o te relajan, una buena sesión de deporte, una meditación y hasta una salida tranquila con amigos pueden poner tu mente en perspectiva y ayudarte a enfrentar los cambios con buen juicio y de forma propositiva.
Por último, pero no menos importante
Acudir a un experto que te de consejos personalizados, pensados en tus necesidades y tu condición de salud en general es de vital importancia para tener una transición tranquila y saludable a tu nuevo espacio. En centros como QuiroVida podrás encontrar quiroprácticos profesionales que te ofrecen el mejor saber y tratamiento para tener una columna y un sistema nervioso fuerte y preparado para tu mudanza.
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